El gato negro es un relato corto escrito por Edgar Allan Poe, publicado en 1843. La historia está narrada en primera persona por un hombre que, al principio del relato, asegura ser completamente racional y equilibrado. Sin embargo, a medida que avanza, revela cómo su vida comienza a desmoronarse debido a su creciente adicción al alcohol y sus violentos arranques de ira. Después de maltratar a su gato, Pluto, el protagonista experimenta una serie de sucesos extraños y perturbadores. A medida que su comportamiento se vuelve más errático, el gato regresa de una manera misteriosa y parece estar vinculado a eventos cada vez más macabros. La historia toma un giro aún más oscuro cuando, en un acto de desesperación, el protagonista comete un asesinato y trata de ocultarlo, pero su propia culpa y la presencia inquietante del gato lo persiguen, llevando al relato a un final impactante. El gato negro explora temas como la culpa, la locura, el arrepentimiento y el mal, con un enfoque psicológico profundo que crea una atmósfera de horror y tensión. La narración inquietante y la atmósfera opresiva hacen de esta obra un ejemplo destacado del estilo gótico de Poe.